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Art Wallpapers

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Selección de fondos de pantalla gratuitos

Simplemente echa un vistazo a las obras que te presentamos, escoge aquella que más te guste y descárgala. Todos los fondos son copias de alta resolución de la obra original, sin textos o molestas marcas de agua.

Aivazovsky, Ivan: «The ninth wave»
State Museum, Saint Petersburg

Aivazovsky logra en esta pintura una perfección técnica absoluta, presentando a unos náufragos intentando sobrevivir a las despiadadas embestidas en forma de olas del océano. El centro de la composición es la potente, casi mística, representación difusa del sol.

Alma-Tadema, Lawrence: «Unconscious rivals»
Private collection

Aunque nacido en los Países Bajos, Sir Lawrence Alma-Tadema pasó la mayor parte de su vida en Londres, donde llegó a ser uno de los más famosos pintores victorianos. Es autor de varias composiciones complejas sobre el Imperio Romano, como ésta o «Las Rosas del Heliogabalus»

Arcimboldo, Giuseppe: «The market gardener», c.1590
Civic Museum , Cremona

Quizás la máxima expresión de la originalidad de Arcimboldo sean los retratos invertidos, esto es, aparentes bodegones que, una vez girados 90º, se convierten en extraños y perturbadores retratos. «El asado» (c.1570) y «El hortelano» (c.1590) son los ejemplos más logrados y famosos.

Bellows, George: «Shore house», 1911
Private collection

George Bellows es un pintor americano famoso principalmente por sus composiciones sobre la vida urbana de Nueva York («Cliff Dwellers» o su «Polo Crowd»). Sin embargo, también completó algunas marinas de gran belleza, como «Casa en la costa» o «Paradise Point»

Bierstadt, Albert: «Among the Sierra Nevada mountains», 1868
Whitney Museum of Art

Bierstadt emigró de Europa con su familia siendo un niño a Massachusetts. Es uno de los primeros pintores en representar la grandiosidad del Oeste Americano, destacando sus vistas de Yosemite, el Río Kern o las White Mountains. Es el más prolífico y grandilocuente de todos los pintores americanos de su época.

Bierstadt, Albert: «Storm over the Rocky Mountains»
Fogg Art Museum, Cambridge (USA)

Una de las obras más famosas y reproducidas de Albert Bierstadt, el más prolífico y grandilocuente de todos los pintores americanos de su época, y uno de los grandes paisajistas del siglo XIX

Boccioni, Umberto: «The City Rises», 1910
New York, MOMA

Ésta es una de las más importantes obras del futurismo. Boccioni retrata la construcción de la ciudad moderna, enfatizando la importancia del trabajo y el dinamismo de la vida moderna.

Bosch, Hieronymus: «The Garden of delights», c.1510
Madrid, Museo del Prado

Una de las pinturas más famosas de toda la pintura occidental. La obra de El Bosco es básicamente moralizante, didáctica. El Bosco ve en la sociedad de su época el triunfo del pecado, de la carne, de todas las cosas que han arrebatado al ser humano su carácter angelical.

Botticelli, Sandro: «The Birth of Venus»
Florence, Ufizzi

Esta pintura no es sólo la obra más famosa de Botticelli, sino también una de las más famosas de todo el Renacimiento italiano. Su colorido y sensualidad parecen afirmar aquel dicho de que «si Botticelli viviera hoy, trabajaría par Vogue»

Bruegel the elder, Pieter: «Dutch proverbs», 1559
Berlin, Gemäldegalerie

Las obras de Bruegel (tanto esta como » Juegos de niños») están cargadas de ironía y de un amor por la vida rural que parece anticipar el paisajismo holandés del siglo posterior

Canaletto: «The Regatta seen from Ca Foscari», 1727
London, National Gallery

Giovanni Antonio del Canal -llamado Canaletto- es sin duda el más famoso de los pintores venecianos de su época. Entre sus numerosos pupilos se citan Bellotto, Guardi o Moretti, entre otros.

Cézanne, Paul: «Montagne Sainte-Victoire», 1882-85
New York, Metropolitan Museum

Es una obra cubista antes del cubismo: la montaña triangular y los elementos de la pradera -tanto geográficos como edificatorios- adquieren volumen no gracias a la perspectiva, sino a la superposición de planos cromáticos.

Cézanne, Paul: «Still life with apples and oranges», 1895-1900
New York, Metropolitan Museum

Paul Cézanne es quizás el mayor maestro del bodegón de cualquier época, y esta brillante pintura constituye una de sus composiciones más ambiciosas.

Church, Frederick Edwin: «Cotopaxi», 1855
Smithsonian Museum

Church representa la culminación de la Escuela del río Hudson: posee el amor por el paisaje de Cole, el lirismo romántico de Durand y la grandilocuencia de Bierstadt.

Church, Frederick Edwin: «Morning at the tropics», 1877
Washington, National Gallery of Art

Church es sin duda de uno de los mejores paisajistas de todos los tiempos, tal vez sólo superado por Turner y algunos artistas posteriores como Monet o Cézanne.

Cole, Thomas: «Crawford Notch», 1839
Washington, National Gallery of Art

Thomas Cole es conocido como el fundador de la Escuela del río Hudson. Británico de nacimiento, su familia emigra a América siendo él muy joven. Cole descubre la belleza del río Hudson en 1825, y comienza a crear sus primeros esbozos y bocetos al aire libre

Constable, John: «The Hay Wain», 1821
London, National Gallery

Constable es, tras Turner, la gran figura del romanticismo inglés. Al contrario que su coetáneo, nunca salió de Inglaterra, dedicándose a retratar con maestría la vida y paisajes de la Inglaterra rural.

Degas, Edgar: «Ballet class», 1875
Private collection

Las pinturas que Edgar Degas creó describiendo bailarinas y clases de baile están consideradas como algunas de las más logradas y reconocibles de todo el impresionismo.

Delacroix, Eugene: «Liberty leading the people», 1830
Paris, Louvre

Esta es una obra cargada de simbolismo. Imagen indisolublemente asociada a la Revolución Francesa, esta obra de Delacroix demuestra la capacidad de la pintura no sólo para impresionar y emocionar, sino también para convertirse en el símbolo de una época.

Durand, Asher Brown: «Kindred spirits» (detail), 1849
Private collection

Vemos dos hombres en lo alto de unas rocas, contemplando un fantástico valle fluvial. Dos elementos simbólicos –la cascada y el águila- remarcan una vertical que organiza la composición. Todo está en paz, todo es perfecto en la grandiosidad de la Naturaleza

Durand, Asher Brown: «Pastoral landscape», 1861
Washington, National Gallery of Art

Durand se introduce en el paisaje tras conocer las obras de Thomas Cole. Más romántico que su maestro, sus obras son no obstante más bellas y poéticas, con claras influencias de maestros como Hobbema o Claudio de Lorena.

Eakins, Thomas: «Shad fishing at Gloucester, Delaware River», 1881
Philadelphia Museum of Art

Thomas Eakins es uno de los principales pintores del siglo XIX americano. En 2006, «The Gross clinic», descrita como «la mejor pintura americana del siglo XIX» fue adquirida por la National Gallery y el Crystal Bridges Museum por 68 millones de dólares

Friedrich, Caspar David: «The great Preserve (Ostra Preserve)», 1832
Dresden, Gemäldegalerie

Caspar David Friedrich es el más famoso pintor romático alemán, y uno de los grandes paisajistas de todos los tiempos. «El vado del Ostra» muestra la fabulosa capacidad del pintor para representar la grandiosidad de la naturaleza

Friedrich, Caspar David: «Wreck in the Sea of Ice», 1823/24
Hamburg, Kunsthalle

Caspar David Friedrich es el más famoso pintor romático alemán, y uno de los grandes paisajistas de todos los tiempos. Esta pintura, terriblemente potente, es una de sus mejores y más impresionantes composiciones

Gauguin, Paul: «The day of the Gods», 1894
Chicago, Art Institute

Gauguin viajó a los trópicos buscando una redención artística, una búsqueda de lo primitivo y exótico para purificar su arte.

Gérôme, Jean-Léon: «Bethsabee», 1889
Paris, Louvre

Gérôme fue uno de los últimos maestros de la tradición neoclasicista francesa. Rechazando el impresionismo, produjo muchas obras en un estilo orientalista e historicista.

Hiroshige, Ando: «Men poling boats past a bank with willows», 1858
Tokyo, National Museum

Ando Hiroshige está considerado como el último gran maestro de la estampa japonesa, interesado, al igual que Hokusai, por el paisaje y los elementos naturales. Su indiscutible obra maestra es la serie de «Cien paisajes famosos de Edo»

Hokusai, Katsushika: «The wave», c.1830
New York, Metropolitan Museum

La ola se nos presenta como un monstruo, un leviatán que amenaza con sus colmillos a las ágiles y audaces barcas que cruzan el mar. La terrible garra del océano es tan poderosa que parece ir a devorar incluso al sagrado monte Fuji

Homer, Winslow: «The Gulf Stream»
New York, Metropolitan Museum

Realmente, la terrible expresividad de la obra hace innecesario cualquier comentario, mientras asistimos a un final seguramente trágico del desafortunado marino, representado sin prescindir de una cierta exageración.

Klee, Paul: «Revolving House», 1921
Madrid, Thyssen-Bornemisza Museum

Pocos artistas son tan difíciles de clasificar como Paul Klee, un innovador imprescindible en una época llena de cambios artísticos. «Casa giratoria» muestra su maestría en el color y tonalidad para crear pinturas llenas de ritmo.

Klimt, Gustav: «Beech forest», 1903
Neue Galerie der Stadt

Gustav Klimt (1862 – 1918) fue un pintor simbolista austricaco, máximo exponente del Art Noveau en Viena. En el año 2006 una de sus obras fue vendida por 135 millones de dólares, entonces un precio record para cualquier obra de Arte

Leonardo da Vinci: «The Last supper (detail)», 1495-97
Milano, Santa Maria della Grazia

La figura de Leonardo ha generado multitud de leyendas, mitos, rumores sobre su homosexualidad, su pertenencia a infinidad de logias o sectas, historias sobre su estancia en el estudio de Verrocchio, o su extraña relación con varias de sus modelos.

Lorrain, Claude: «Embarkation of the Queen of Saba», 1648
London, National Gallery

Claudio de Lorena está ampliamente considerado como uno de los más importantes paisajistas de todos los tiempos, influyendo en pintores románticos como Delacroix, Gericault, o incluso Joseph Mallord William Turner

Macke, Auguste: «Gartenrestaurant»
Bern, Kunstmuseum

August Macke fue uno de los más importantes pintores del expresionismo alemán, miembro fundador del mítico grupo «El jinete azul» junto a nombres de la talla de Kandinsky.

Malevich, Kazimir: «Painterly realism of a football player (detail)», 1915
Heirs of Kazimir Malevich

Creador del Suprematismo, Malevich es una de las más polémicas figuras del arte del siglo XX. En el año 2008, una de sus «composiciones suprematistas» fue vendida por 60 millones de dólares en Nueva York.

Manet, Edouard: «Bar at the Folies Bergere», 1882
London, Courtald Institute Galleries

Las pinturas de cafes y restaurantes de Manet son verdaderos»retratos» de la sociedad parisina del siglo XIX. Esta fabulosa e intrincada pintura es sin duda una de sus obras maestras..

Marc, Franz: «The yellow cow», 1911
New York, Guggenheim Museum

Nacido en 1880, Franz Marc fue uno de los principales pintores del movimiento expresionista. Mostró un gran interés por la naturaleza, representada con colores brillantes y de gran expresividad, como vemos en «El destino de los animales» y «La vaca amarilla»

Michelangelo: Frescoes in the Sistine Chapel, c.1540
Sistine Chapel

La Capilla Sixtina constituyen una de las obras cumbre del Arte universal. «El juicio final» es una composición colosal en la que Michelangelo crea un universo de titanes vigorosos, formados por volúmenes casi escultóricos

Millais, Sir John Everett: «Ophelia», 1852
London, Tate Gallery

John Everett Millais fue uno de los miembros de la Hermandad Pre-Rafaelista (junto a Dante Gabriel Rossetti, John William Waterhouse y William Holman Hunt). El tema de esta famosa pintura está sacado del Hamlet de Shakespeare.

Monet, Claude: «Terrace at Sainte Adresse», 1867
Metropolitan Museum of Art, New York

La escena burguesa se desarrolla bajo una potente luz de “plein air”. La pintura tiene un encanto tal que nos sentimos tentados a sentarnos en una de las sillas vacías a disfrutar de esta plácida tarde de domingo.

Monet, Claude: «The cliff walk, Pourville», 1882
Nationalmuseum, Stockholm

Entre 1881 y 1883 Monet realizó una serie de viajes por distintos pueblos de la costa normanda, centrándose más en el paisaje costero que en el propio océano, aprovechando el dramatismo de la escarpada costa normanda y sus espectaculares acantilados

Monet, Claude: «Antibes seen from the Salis Gardens», 1888
Toledo Museum of Art

En 1888 Monet alquiló durante tres meses un pequeño castillo en Antibes, en la Costa Azul. El paisaje –“tan lleno de luz”- del Mediterráneo enamoró al artista, que trabajó como un obseso para conseguir los tonos turquesas y rosados de la luz mediterránea.

Monet, Claude: «The artist’s garden at Giverny», 1900
Yale Art Galleries

En su tardío retiro de Giverny Monet compuso obras sensacionales y de gran belleza, relacionadas con el paradisíaco jardín que cultivó hasta el final de sus días.

Monet, Claude: «Nympheas, Japanese Bridge», 1899
New York, Metropolitan Museum

Los nenúfares de Monet han sido descritas como «Capilla Sixtina del Impresionismo». En ellas, Claude Monet logra unas composiciones en las que, más allá de su innegable belleza, llega a rozar la abstracción.

Raphael: «The School of Athens», c.1510/11
Vatican, Apostolic Palace

«La Escuela de Atenas» esn una de las más complejas y famosas de la pintura occidental. La lista de personajes retratados incluye a Platón, Sócrates, Pitágoras, o el propio Rafael, autorretratado como Apeles

Rembrandt: «The Night watch», 1641-42
Amsterdam , Rijksmuseum

Una de las pinturas más importantes de la historia del Arte. Rembrandt ha representado el momento exacto en el que el capitán de la compañía ha dado orden de avanzar, pero esta orden parece no haber llegado aún a sus subordinados.

Renoir, Pierre-Auguste: «Moulin de la Galette», 1876
Paris, Musée d’Orsay

Esta pintura ha sido descrita en ocasiones como «la pintura más bella del siglo XIX». La escena describe uno de los bailes que se celebraban en el Molino de la Galette, uno de los locales de diversión más frecuentados de Montmartre

Rousseau, Henri: «The dream», 1910
New York, Museum of Modern Art

Atemporal e increíblemente sugestiva, «El sueño» fue descrita por su autor con este discurso: «La mujer en el sofá sueña que ha sido trasladada a este bosque y escucha el sonido de la encantadora de serpientes.»

Seurat, Georges: «Sunday afternoon on the island of La Grande-Jatte», 1884-86
Chicago, Art Institute

Georges Seurat es uno de los pintores más famosos del postimpresionismo, y esta pintura es su incuestionable obra maestra, una de las obras más conocidas de todo el siglo XX gracias al dominio del «puntillismo» y la composición

Shishkin, Ivan: «Morning in a pine forest»
Tetryakov Gallery, Russia

Una fantasía pictórica que trasciende del puro realismo de otros pintores rusos de la época. Shishkin ha elegido uno de sus temas favoritos, los densos bosques de coníferas rusos, añadiendo además la inusual y bucólica presencia de una familia de osos de los bosques.

Sisley, Alfred: «Bridge at Villeneuve – la – Garenne», 1872
New York, Metropolitan Museum

Alfred Sisley fue por encima de todo un paisajista. Se sintió desde el principio atraído por el paisaje fluvial, tanto por el río en si mismo, especialmente por los reflejos en la superficie del agua, como por la medio humano en sus alrededores.

Toulouse-Lautrec, Henri: «At the Moulin Rouge», 1890
Paris, Musée d’Orsay

Pintor de origen aristócrata, Toulouse Lautrec alcanzó justa fama como gran retratista de la noche parisina de finales del siglo XX. Esta pintura está considerada como una de sus obras maestras..

Turner, Joseph Mallord William: «Rain, speed and steam», 1844
London, National Gallery of Art

Probablemente el mejor paisajista de todos los tiempos, Turner consigue aquí su máximo logro en lo que constituye una obra casi impresionista. La pintura es una sensacional conclusión a las investigaciones de Turner sobre la luz y la atmósfera

Van Gogh, Vincent: «Harvest», 1888
Amsterdam, Van Gogh Museum

Esta extraordinaria y muy famosa obra de van Gogh fue pintada al aire libre, y demuestra el amor por la vida campesina de Vincent van Gogh. Es una obra llena de luz y color.

Van Gogh, Vincent: «Starry night», 1889
New York, Metropolitan Museum

Una de las obras más famosas y reproducidas de van Gogh, comúnmente asociada a su creciente locura, y que en realidad es resultado de la preocupación del artista por las investigaciones astronómicas del momento.

Van Gogh, Vincent: «Field of poppies», 1889
Bremen, Kunsthalle

Este atractivo paisaje es un buen ejemplo del estilo final de van Gogh, con una pincelada marcada y el uso de colores vivos y brillantes, erróneamente asociados a su locura

Velázquez, Diego de: «Venus at her mirror», 1649/1651
London, National Gallery

Velázquez es no solo el mejor pintor español del siglo de oro, sino que junto a Rembrandt se le considera como la cumbre de la pintura barroca. Esta sensual pintura es una de sus obras maestras.

Vermeer: «View of Delft», 1660-61
The Hague, Mauritshuis

De esta pintura se ha dicho que es la primera obra impresionista de la historia de la pintura. Marcel Proust llegó incluso a asegurar que era » el más bello cuadro del mundo».

Waterhouse, John William: «The Lady of Shalott», 1888
London, Tate Gallery

John William Waterhouse fue uno de los miembros de la Hermandad Pre-Rafaelista (junto a Dante Gabriel Rossetti, John Everett Millais y William Holman Hunt). El grupo tuvo mucha influencia en las obras de J.R.R. Tolkien años después.

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